Este mes de marzo el sol sacude como un mazo. Es como un soplete sobre la nieve de la Sierra de Guadarrama y no respeta los neveros que quedan en las laderas de solana.
Así se ven las vertientes más expuestas al sol:
Y así se conserva en las caras norte:
No está todo perdido, pero si más lejos.
A ver si viene la nieve, 😀